Armenia y Azerbaiyán alcanzan un acuerdo de paz histórico después de más de 30 años de conflicto
Ereván, la capital de Armenia, tendrá que modificar su constitución para eliminar todas las reivindicaciones sobre la región de Nagorno-Karabaj; la misión de la Unión Europea abandonará la frontera entre Armenia y Azerbaiyán; y ambos países renunciarán a sus reclamaciones en los tribunales internacionales. El acuerdo de paz también abre la puerta a la reconstrucción de las relaciones diplomáticas y económicas entre los dos países.
Funcionarios armenios y azerbaiyanos dijeron el jueves que habían acordado el texto de un acuerdo de paz para poner fin a casi cuatro décadas de conflicto entre los países del Cáucaso Sur, un avance repentino en un proceso de paz desigual y a menudo amargo.
Los dos países postsoviéticos han librado una serie de guerras desde fines de la década de 1980, cuando Nagorno-Karabaj, una región de Azerbaiyán con una población étnicamente armenia mayoritaria, se separó de Azerbaiyán con el apoyo armenio.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia dijo el jueves que su país había finalizado un proyecto de acuerdo de paz con Azerbaiyán.
"El acuerdo de paz está listo para la firma. La República de Armenia está dispuesta a iniciar consultas con la República de Azerbaiyán sobre la fecha y el lugar de la firma del acuerdo", declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia en un comunicado. Sin embargo, el calendario para la firma del acuerdo es incierto, ya que Azerbaiyán ha declarado que un requisito previo para firmarlo es modificar la Constitución de Armenia, que, según afirma, hace reclamaciones implícitas sobre su territorio.
Armenia niega tales afirmaciones, pero el primer ministro Nikol Pashinyan ha dicho repetidamente en los últimos meses que el documento fundador del país debe ser reemplazado y ha pedido un referéndum para hacerlo, aunque no se ha fijado ninguna fecha.
El estallido de hostilidades a finales de la década de 1980 provocó la expulsión masiva de cientos de miles de azeríes, en su mayoría musulmanes, de Armenia y de armenios, en su mayoría cristianos, de Azerbaiyán.
Las conversaciones de paz comenzaron después de que Azerbaiyán recuperara Karabaj por la fuerza en septiembre de 2023, lo que provocó que casi la totalidad de los 100.000 armenios del territorio huyeran a Armenia.