El Consejo de Seguridad de la ONU respalda el plan de paz de Trump para Gaza y la creación de una fuerza de estabilización internacional
La resolución aprueba la creación de una Fuerza Internacional de Estabilización y la Junta de Paz encabezada por Trump, con miras a garantizar la seguridad, la reconstrucción de Gaza y un posible camino hacia un Estado palestino, mientras Israel y Hamás reaccionan con reservas.
El Consejo de Seguridad de la ONU votó el lunes a favor de una resolución patrocinada por Estados Unidos que autoriza la creación de una Fuerza Internacional de Estabilización (ISF, por sus siglas en inglés) para garantizar la seguridad en la Franja de Gaza. La medida se enmarca dentro del plan de 20 puntos del presidente estadounidense Donald Trump para poner fin a la guerra en este enclave costero.
La resolución proporciona un impulso crucial para los esfuerzos de Washington por mantener el alto al fuego en Gaza, firmado el 9 de octubre, el cual ha estado bajo tensión debido a la amenaza de Israel de reanudar las operaciones militares si no se toman medidas para desarmar a Hamas, que mantiene el control de facto sobre casi la mitad del territorio tras una retirada parcial israelí al iniciarse el cese de hostilidades.
El papel de la Fuerza Internacional de Estabilización y la demilitarización de Gaza
Aunque Estados Unidos sostiene que los líderes de Hamas se comprometieron a desarmarse antes de la firma del acuerdo y ha trabajado en las últimas semanas para negociar el desmantelamiento de sus armas con éxito limitado, el plan de 20 puntos de Trump también prevé que la Fuerza Internacional de Estabilización (ISF) participe directamente en la desmilitarización de Gaza.
Washington reconoció que los países interesados en aportar tropas a la fuerza extranjera necesitaban un mandato internacional respaldado por la ONU. Por ello, durante varias semanas elaboró la resolución correspondiente y mantuvo conversaciones con los miembros del Consejo de Seguridad, así como con aliados clave árabes y musulmanes, quienes también fueron consultados durante la formulación del plan de 20 puntos.
Si bien Estados Unidos enfrentó cierta resistencia la semana pasada cuando Rusia intentó presentar una resolución alternativa, esos esfuerzos fueron rápidamente neutralizados, y durante el fin de semana quedó claro que la iniciativa de la administración Trump tendría éxito, según un diplomático occidental en la ONU.
Apoyo internacional y desafíos logísticos
El diplomático destacó que Estados Unidos logró unir a actores clave árabes y musulmanes detrás de la resolución, mientras neutralizaba posibles obstáculos de Rusia y China, que acordaron abstenerse de la votación. Todos los demás países votaron a favor.
Sin embargo, el mismo diplomático advirtió que Estados Unidos podría enfrentar un desafío aún mayor para convencer a los países de aportar tropas a la ISF, ya que gran parte del mundo árabe se ha mostrado reacio a enviar fuerzas a una zona de conflicto donde podrían verse obligadas a participar en combates para desarmar a Hamas, grupo que ha insistido públicamente que no entregará sus armas.
Antes de la votación, el embajador estadounidense ante la ONU, Mike Waltz, afirmó que la resolución autoriza "una coalición fuerte de cascos azules, muchos de ellos de países de mayoría musulmana como Indonesia, Azerbaiyán y otros, para desplegarse bajo un mando unificado". La mención explícita de estos países indica que siguen considerando aportar tropas pese a las condiciones difíciles que enfrentarán en Gaza.
Funciones de la Fuerza Internacional de Estabilización y creación de la Junta de Paz
La resolución establece que la Fuerza Internacional de Estabilización (ISF) ayudará a asegurar las fronteras de Gaza, proteger a los civiles, garantizar la entrega de ayuda humanitaria, capacitar a la policía palestina y, lo más crítico para Israel, asegurar el proceso de desmilitarización del territorio.
Además, la resolución "da la bienvenida a la creación de la Junta de Paz, que será presidida por Trump y tendrá la tarea de supervisar la reconstrucción de Gaza y la creación de un gobierno palestino tecnocrático encargado de administrar los servicios diarios en el enclave".
Ni la Junta de Paz ni el gobierno tecnocrático palestino han sido conformados aún, aunque el plan de 20 puntos menciona que la junta incluirá al ex primer ministro británico Tony Blair, y Estados Unidos ha estado considerando varios nombres para ambos órganos durante los últimos meses, según diplomáticos árabes.
La resolución autoriza que la Junta de Paz y la Fuerza Internacional de Estabilización (ISF) operen en Gaza hasta finales de 2027, y un funcionario estadounidense declaró que Washington apunta a que la fuerza extranjera despliegue sus tropas a comienzos de 2026.
Controversias sobre la vía hacia un Estado palestino
Para recabar apoyo internacional, Estados Unidos organizó una declaración conjunta el viernes que afirmaba que el plan de Trump ofrecía un camino hacia la creación de un Estado palestino. Esta formulación, más firme que la del plan original, que solo mencionaba que podría "proporcionar tal resultado", generó malestar entre los aliados de derecha del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, quienes reiteraron su rechazo a la soberanía palestina.
Netanyahu había aceptado verbalmente el plan de 20 puntos durante su visita a la Casa Blanca en septiembre, pero el acuerdo de alto al fuego firmado con Hamás fue un documento separado, centrado únicamente en la tregua, la retirada inicial israelí, el intercambio de rehenes y prisioneros, y las provisiones humanitarias. El plan completo de 20 puntos fue incluido como anexo en la resolución aprobada por el Consejo de Seguridad.
El punto 19 de la resolución establece:
"A medida que avance la reconstrucción de Gaza y se lleve a cabo fielmente el programa de reformas de la Autoridad Palestina, podrían finalmente establecerse condiciones para un camino creíble hacia la autodeterminación y la soberanía palestina, que reconocemos como aspiración del pueblo palestino".
El último punto señala:
"Estados Unidos establecerá un diálogo entre Israel y los palestinos para acordar un horizonte político de coexistencia pacífica y próspera".
Estos puntos habrían motivado la reticencia de Israel a celebrar la resolución, pese a ser promovida por su aliado más cercano. Según el embajador israelí ante la ONU, Danny Danon, "la desmilitarización de Hamás es una condición básica del acuerdo de paz. No habrá futuro en Gaza mientras Hamás posea armas".
Reacciones de las partes involucradas
La Autoridad Palestina (AP) celebró la aprobación de la resolución, destacando su disposición a trabajar con la comunidad internacional para implementar la medida "de manera que ponga fin al sufrimiento de nuestro pueblo en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este, y avance el camino político hacia la paz, seguridad y estabilidad entre palestinos e israelíes, basado en la solución de dos Estados".
Ramala también agradeció a quienes apoyan los "esfuerzos palestinos para poner fin a la ocupación y lograr libertad e independencia, basados en el compromiso de avanzar hacia una solución justa y completa de la cuestión palestina, que traiga paz, estabilidad y seguridad a la región y al mundo".
Por su parte, Hamás criticó duramente la resolución, alegando que "no cumple con los derechos y demandas de los palestinos y busca imponer un protectorado internacional sobre el enclave, al que se oponen tanto los palestinos como las facciones de resistencia". El grupo sostuvo que asignar a la fuerza internacional tareas dentro de Gaza, incluyendo el desarme de la resistencia, "le quita neutralidad y la convierte en parte del conflicto a favor de la ocupación (Israel)", añadiendo que "resistir la ocupación por todos los medios es un derecho legítimo".
Declaraciones de Trump tras la resolución
Poco después de la aprobación, Donald Trump publicó un mensaje en Truth Social en el que "felicitaba al mundo" y afirmaba que la Junta de Paz, que él encabezará, incluirá "a los líderes más poderosos y respetados de todo el mundo".
Trump aseguró que la adopción de la resolución "conducirá a una mayor paz en todo el mundo", aunque es notable que no mencionó en ningún momento a Israel, Hamás, la Autoridad Palestina (AP) ni la Franja de Gaza, actores centrales en el conflicto que motivó la iniciativa.





