El presidente iraní rechaza la oferta de Netanyahu de tecnología hídrica en medio de la escasez
Un día después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, sugiriera que los iraníes salieran a las calles para protestar por la situación, el presidente iraní, Masoud Pezeshkian, criticó duramente la oferta de la nación que priva a Gaza de agua.
El presidente iraní, Masoud Pezeshkian, criticó el miércoles el llamado que hizo el día anterior el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a los iraníes para que se rebelaran contra su gobierno por la escasez de electricidad y agua.
El mensaje en video de Netanyahu del martes se produjo mientras Irán enfrenta una persistente escasez de agua y electricidad en medio de períodos de intenso calor. Esto también ocurrió apenas dos meses después de una guerra de 12 días entre los archienemigos, que comenzó con el ataque de Israel el 13 de junio a la infraestructura militar y nuclear iraní, que según Israel tenía la intención de impedir que la República Islámica llevara a cabo su plan declarado de destruir el Estado judío.
En sus comentarios, Netanyahu instó a los iraníes a "tomar riesgos por la libertad", "salir a las calles" y exigir cuentas al gobierno iraní. Sugirió traer expertos israelíes en agua para aportar "tecnología y experiencia de vanguardia" a Teherán.
- Un día después, en una publicación en X, Pezeshkian arremetió contra Netanyahu.
"¿Un régimen que priva a Gaza de agua y alimentos ahora dice que traerá agua a Irán? ¡UN ESPEJISMO, NADA MÁS!", escribió Pezeshkian en persa e inglés.
La persistente escasez de agua en Irán ha provocado una drástica caída de los niveles de los embalses del país. Pezeshkian advirtió hace dos semanas que "si no podemos gestionarlo y la gente no coopera para controlar el consumo, no habrá agua en los embalses para septiembre u octubre".
Las altas temperaturas que comenzaron a mediados de julio también han sobrecargado la red eléctrica iraní, provocando apagones esporádicos en todo el país. Los frecuentes cortes de electricidad han afectado gravemente la producción industrial. La semana pasada, las autoridades iraníes también ordenaron el cierre de numerosas oficinas gubernamentales en un intento por reducir el consumo de energía.
Israel es considerado uno de los líderes mundiales en tecnología de desalinización y ha compartido sus innovaciones con varios países. También ha enfrentado duras críticas por las terribles condiciones humanitarias en Gaza, donde el agua escasea después de que gran parte de la infraestructura de la Franja resultara dañada durante 22 meses de combates.
Israel afirma operar dos oleoductos a la Franja de Gaza, suministrando millones de litros de agua por día, y también afirma estar supervisando un proyecto de los Emiratos Árabes Unidos para operar un nuevo oleoducto que suministrará agua desde una planta desalinizadora en Egipto a los habitantes de Gaza a lo largo de la costa. El mes pasado, una de las plantas desalinizadoras de la Franja reanudó sus operaciones después de que Israel restableciera el suministro eléctrico.