El Reino Unido, Francia y Canadá amenazan a Israel con sanciones si continúa su ofensiva en Gaza

Los gobiernos europeo y canadiense han advertido que tomarán "medidas concretas" si Israel no pone fin a su operación y permite la entrada de ayuda humanitaria a Gaza. Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, acusó a Francia, Reino Unido y Canadá de "recompensar a Hamás" por criticar la ofensiva israelí.

Francia, el Reino Unido y Canadá exigieron que Israel "reanude de inmediato y por completo" los envíos de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza o se enfrentará a "medidas concretas".

"Si Israel no pone fin a la nueva ofensiva militar ni levanta sus restricciones a la ayuda humanitaria, tomaremos otras medidas concretas en respuesta", firmaron en una declaración conjunta el presidente francés, Emmanuel Macron, el primer ministro canadiense, Mark Carney, y el primer ministro británico, Keir Starmer.

Aunque no especificaron qué sanciones podrían imponerse, los tres líderes prometieron que no se quedarán "de brazos cruzados mientras el gobierno israelí de Benjamin Netanyahu continúa con estas acciones escandalosas".

En el pasado, el Reino Unido ha impuesto sanciones financieras contra tres asentamientos ilegales y cuatro organizaciones "que han apoyado y patrocinado la violencia contra las comunidades en Cisjordania (ocupada)".

Israel busca tomar el control de la Franja de Gaza para derrotar al movimiento islamista Hamás, que atacó suelo israelí el 7 de octubre de 2023, pero la ONU advierte del creciente riesgo de hambruna en una Gaza bloqueada.

"Israel sufrió un terrible atentado el 7 de octubre", comentaron los líderes. "Siempre hemos apoyado el derecho de Israel a defender a los israelíes del terrorismo, pero esta escalada es completamente desproporcionada", añadieron en su declaración.

Macron, Carney y Starmer también condenaron el "lenguaje de odio utilizado recientemente por miembros del gobierno israelí" y advirtieron que el continuo desplazamiento forzado de civiles viola el derecho internacional humanitario. Respecto a la conferencia prevista para el 18 de junio en Nueva York sobre la solución de dos Estados, se comprometen a "trabajar con la Autoridad Palestina, los socios regionales, Israel y Estados Unidos para lograr un consenso sobre los acuerdos para el futuro de Gaza, basándose en el plan árabe".

"Estamos decididos a reconocer un Estado palestino como una contribución al logro de una solución de dos Estados, y estamos dispuestos a trabajar con otros para ese fin", añadieron los líderes de Francia, Canadá y el Reino Unido.

Por su parte, Netanyahu consideró que "al pedir a Israel que ponga fin a una guerra defensiva por nuestra supervivencia antes de que los terroristas de Hamás en nuestra frontera sean destruidos y al exigir un Estado palestino, los líderes de Londres, Ottawa y París están ofreciendo un precio inmenso por el ataque genocida contra Israel del 7 de octubre, mientras abren la puerta a más atrocidades similares", dijo el primer ministro israelí en un comunicado. El ataque de Hamás dejó 1.218 muertos, según un recuento basado en datos oficiales israelíes.

Los islamistas también secuestraron a 251 personas ese día. De ellas, 57 permanecen cautivas en Gaza, aunque 34 fueron declaradas muertas por el ejército israelí. Según el último informe del Ministerio de Salud de Gaza, la ofensiva israelí ya ha dejado más de 53.486 muertos en el territorio, una cifra considerada fiable por la ONU.

El martes, los rescatistas en la Franja de Gaza informaron de la muerte de al menos 44 personas por los bombardeos israelíes, que han intensificado sus operaciones militares en el devastado territorio palestino en los últimos días.

Veintidós países llaman la atención a Israel

Las declaraciones del Reino Unido, Canadá y Francia coincidieron con un llamado más amplio de 18 países que exigen que Israel "reanude inmediatamente la ayuda total a la Franja de Gaza", organizado por las Naciones Unidas y las ONG. Nueve camiones con ayuda humanitaria de la ONU pudieron ingresar a la Franja de Gaza el lunes, anunció el jefe de operaciones humanitarias de la ONU, Tom Fletcher, calificando la afluencia como una "gota en el océano". El gobierno israelí sólo confirmó la llegada de cinco camiones con ayuda.

La población de Gaza "se enfrenta a la hambruna" y "debe recibir la ayuda que necesita desesperadamente", instan los ministerios de Asuntos Exteriores de Australia, Canadá, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Francia, Alemania, Islandia, Irlanda, Italia, Japón, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, Nueva Zelanda, Noruega, Portugal, Eslovenia, España, Suecia y el Reino Unido.

"La ayuda humanitaria nunca debe politizarse y el territorio palestino no debe reducirse ni someterse a ningún cambio demográfico", añadieron.