Estados Unidos lanza un ataque aéreo contra los hutíes, una milicia respaldada por Irán, en Yemen

Los rebeldes yemeníes informaron de diecinueve muertos y nueve heridos en una zona residencial de Saná. El bombardeo se produjo después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunciara una ofensiva contra los hutíes, a quienes acusa de amenazar la seguridad de su país y de mantener vínculos con Irán.

Un ataque aéreo estadounidense en la capital de Yemen, Saná, dejó al menos nueve muertos y otros nueve heridos el sábado. El ataque se produjo después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunciara "una acción militar decisiva y poderosa" contra el grupo insurgente respaldado por Irán.

La cadena Al Masirah, afiliada a los hutíes, informó de un bombardeo de un barrio residencial en la capital y de otro en Saada, una zona controlada por los rebeldes en el norte del país.

Trump justificó la acción militar argumentando que los ataques hutíes han causado millones de dólares en pérdidas económicas y representan una amenaza directa a la seguridad internacional. "Estos ataques implacables han costado a las economías de Estados Unidos y del mundo miles de millones de dólares, poniendo en riesgo vidas inocentes", dijo el presidente.

El Ministerio de Salud del gobierno hutí indicó que el número de muertos podría aumentar debido a la gravedad de las heridas. Aún no se ha recibido confirmación oficial del gobierno británico sobre su participación en los ataques.

La operación sigue al anuncio que hicieron los hutíes el 11 de marzo de que reanudarían los ataques contra barcos que consideran vinculados a Israel en el Mar Rojo. Justificaron esta decisión por la continuación del bloqueo israelí a la Franja de Gaza.

Los hutíes, por su parte, advirtieron que "esta agresión no quedará sin respuesta" y prometieron intensificar el conflicto. "Nuestras fuerzas armadas están listas para responder a la escalada con escalada", dijo su oficina política en un comunicado publicado por Al Masirah.

El grupo insurgente, que controla grandes partes de Yemen, ha mantenido estrechas relaciones con Irán, un país al que Trump también apuntó en su mensaje. "El apoyo a los terroristas hutíes debe cesar inmediatamente", escribió el presidente, instando a Teherán a cortar lazos con el grupo rebelde.

Este ataque de Estados Unidos marcó la primera acción militar de Washington contra los hutíes desde que Trump asumió el cargo en enero. La escalada se produce en medio de crecientes tensiones en la región, con el conflicto en Gaza como telón de fondo.

La administración estadounidense ha argumentado que la ofensiva busca garantizar la seguridad de las rutas comerciales y disuadir nuevas agresiones hutíes en el Mar Rojo, donde han atacado repetidamente buques en los últimos meses.

El grupo islamista palestino Hamás calificó los atentados como "una flagrante violación del derecho internacional y un ataque a la soberanía y la estabilidad del país (Yemen)". Según informes locales, Israel impuso un bloqueo de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza el 2 de marzo, lo que se cree que ha llevado a los hutíes a reanudar sus ataques en el Mar Rojo.

Los hutíes informaron que las explosiones del sábado por la noche causaron daños importantes a la infraestructura de Saná y a las instalaciones militares cercanas al aeropuerto. Además, imágenes publicadas en redes sociales mostraron columnas de humo negro sobre la zona afectada. Sin embargo, aún no se ha confirmado la magnitud exacta de los daños.

Estados Unidos ha llevado a cabo ataques previos contra objetivos hutíes en Yemen, en operaciones coordinadas con Israel y el Reino Unido. Hasta el momento, el ejército israelí no ha comentado sobre la reciente ofensiva estadounidense en el país árabe.