Extrema derecha de Israel rechaza plan de Estados Unidos que sugiere un posible Estado palestino

Ministros y líderes de los asentamientos de Cisjordania están presionando al primer ministro israelí para que rechace cualquier avance hacia la creación de un Estado palestino, en medio de las conversaciones de normalización con Arabia Saudí y la venta de aviones de combate F-35.

El intento de reactivar los esfuerzos diplomáticos para lograr un acuerdo de normalización con Arabia Saudita generó una fuerte reacción de los ministros de extrema derecha y las autoridades de los asentamientos en Cisjordania. Estos sectores presionaron al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, para que rechazara cualquier propuesta que pudiera percibirse como un avance hacia la creación de un Estado palestino.

Dos aliados de la derecha de Netanyahu le solicitaron que realizara una declaración pública inequívoca reafirmando que Israel nunca aceptará el establecimiento de un Estado palestino, tras la publicación de una declaración conjunta organizada por Estados Unidos y firmada por varios países. Esta declaración afirmaba que el plan de 20 puntos para Gaza del presidente Donald Trump "ofrece un camino hacia la autodeterminación y la creación de un Estado palestino".

Declaraciones de ministros y líderes de la coalición 

El ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, acusó a Netanyahu de "silencio y vergüenza diplomática", argumentando que el primer ministro no había respondido con firmeza a los recientes reconocimientos unilaterales de un Estado palestino por parte de varios países. Smotrich exigió que Netanyahu "formule de inmediato una respuesta adecuada y decisiva que deje claro al mundo entero que un Estado palestino nunca se establecerá en nuestro territorio".

El pasado mes, Smotrich ya había declarado que no aceptaría un acuerdo de normalización si implicaba la creación de un Estado palestino, con la frase despectiva de que los saudíes podrían "seguir montando camellos".

Por su parte, el ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben Gvir, declaró que "no existe tal cosa como un 'pueblo palestino'" y que "ciertamente no merecen recompensa por el terror, el asesinato y las atrocidades que han sembrado por todas partes". Ben Gvir agregó que la solución real en Gaza es "fomentar la emigración voluntaria" y que su partido, Otzma Yehudit, "no formará parte de ningún gobierno que acepte la creación de un Estado palestino". Insistió en que Netanyahu debe dejar claro que Israel "no permitirá un Estado palestino de ninguna forma".

Historial de advertencias y presión política 

Ben Gvir ha emitido previamente ultimátums a Netanyahu, llegando en ocasiones a amenazar con derribar el gobierno. En octubre, exigió que se desmantelara Hamás y se aplicara la pena de muerte para los terroristas, advirtiendo que su partido abandonaría la coalición si no se cumplían estas demandas. Sin embargo, un mes después, el miembro del parlamento de Otzma Yehudit, Yitzhak Kroizer, aclaró que la facción no buscaba activamente derribar al gobierno.

El ministro de Cultura de Israel, Miki Zohar, del partido Likud de Netanyahu, también expresó oposición a la creación de un Estado palestino, pidiendo que cualquier acuerdo de normalización con Arabia Saudita se realice "sin reconocer un Estado palestino que ponga en peligro nuestra seguridad". Zohar añadió que un acuerdo aceptable podría "cambiar el futuro de Medio Oriente por generaciones".

El exparlamentario de extrema derecha Avi Maoz acusó al presidente Donald Trump de "avanzar hacia un Estado terrorista palestino" en Cisjordania, marcando la diferencia con otros miembros de la coalición que no mencionaron al mandatario estadounidense.

Reacción de los asentamientos y el Consejo Yesha 

El Consejo Yesha, organización que representa a las autoridades locales de los asentamientos de Cisjordania, criticó duramente la vinculación del reconocimiento de un Estado palestino con la diplomacia hacia Arabia Saudita. Afirmó que el gobierno estaría aceptando efectivamente la creación de un Estado palestino a cambio de la normalización con Riad y que el silencio ante recientes reconocimientos europeos facilita su establecimiento de facto.

El consejo reiteró su posición histórica: "es soberanía israelí o Estado palestino", instando a Netanyahu a reafirmar públicamente que un Estado palestino nunca se establecerá, una postura que el primer ministro ha mantenido consistentemente.

Contexto de la declaración conjunta de Estados Unidos 

La reacción de extrema derecha se produjo tras la publicación de la declaración conjunta organizada por Estados Unidos y respaldada por Qatar, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Indonesia, Pakistán, Jordania y Turquía. La declaración apoyaba una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para establecer una Fuerza Internacional de Estabilización (ISF) en Gaza y destacaba que el plan estadounidense "ofrece un camino hacia la autodeterminación y la creación de un Estado palestino", instando a su rápida adopción pese a las objeciones de Rusia y China. 

Tensiones por la venta de aviones F-35 a Arabia Saudita

Paralelamente, surgieron reportes sobre avances en discusiones entre Estados Unidos, Arabia Saudita e Israel respecto a la venta de aviones F-35, aviones de combate sigilosos de última generación. Israel no se opone en principio a la venta, pero insiste en que cualquier transacción esté condicionada a la normalización diplomática con Jerusalén.

Un funcionario israelí citado por Axios dijo que aprobar la venta sin avances diplomáticos sería "contraproducente". Otro funcionario aclaró que Israel ve diferente la venta de F-35 a Arabia Saudita frente a otros países regionales, como Turquía, indicando que se aceptaría como parte de la cooperación de seguridad regional bajo los Acuerdos de Abraham.

Israel mantiene su ventaja militar cualitativa en la región, siendo actualmente el único país de Medio Oriente con F-35 en operación, con 45 unidades activas y 30 más pedidas. Un funcionario subrayó que los aviones saudíes no deberían estar estacionados en la región occidental del reino, advirtiendo que "tarda minutos en volar un F-35 desde Arabia Saudita hasta Israel".

Obstáculos para la normalización con Arabia Saudita 

El presidente Donald Trump indicó que consideraba aprobar la venta de los F-35 antes de la visita del príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, a Washington, donde se esperan firmar acuerdos económicos y de defensa. Trump expresó su deseo de que Arabia Saudita se una pronto a los Acuerdos de Abraham, aunque Riad dejó claro que no normalizará relaciones sin un plan para la creación de un Estado palestino, un punto al que Netanyahu se ha opuesto consistentemente.

La normalización, que parecía cercana antes de la guerra en Gaza, se ha estancado debido a la insistencia saudí en garantías sobre la estatalidad palestina, una demanda que la opinión pública israelí encuentra aún menos aceptable tras dos años de conflicto, especialmente luego de la masacre de Hamás del 7 de octubre de 2023.