Líderes de todo el mundo se despiden del Papa Francisco con dolor, pesar y gratitud
Presidentes, monarcas y personalidades espirituales de todos los continentes expresaron su pesar por la muerte del Papa Francisco y destacaron su cercanía a los más humildes, su papel de guía moral y su incansable trabajo por la paz, la equidad y el diálogo interreligioso.
La noticia de la muerte del Papa Francisco, ocurrida el lunes 21 de abril de 2025, a los 88 años, en Casa Santa Marta, conmocionó al planeta y las condolencias no se hicieron esperar: desde Washington hasta El Cairo, mandatarios, expresidentes y personalidades religiosas lamentaron su fallecimiento con mensajes llenos de afecto, respeto y admiración.
El Sumo Pontífice argentino no sólo fue la cabeza de la Iglesia católica, sino también una figura clave del siglo XXI, admirado por su compromiso con los excluidos, su predicación de la justicia social y su incansable búsqueda de la paz mundial.
En Estados Unidos, el gobierno expresó su pesar con una publicación en redes sociales: "Descansa en paz, Papa Francisco", acompañada de imágenes del pontífice con Donald Trump y JD Vance. Luego, el propio presidente de Estados Unidos, Donald Trump, publicó en Truth Social: "¡Dios lo bendiga a él y a todos los que lo amaron!".
Vance, el actual vicepresidente, quien se reunió con el Papa el día antes de su muerte, escribió: "Mis condolencias están con los millones de cristianos de todo el mundo. Me alegré de verlo ayer, aunque obviamente estaba muy enfermo".
Joe Biden también se unió al duelo: "Será recordado como uno de los más grandes líderes de nuestro tiempo".
Desde México, la presidenta Claudia Sheinbaum definió al padre como "un humanista que eligió a los pobres". En Europa, el presidente francés, Emmanuel Macron, destacó su lucha por "una humanidad más fraterna", y el español, Pedro Sánchez, enfatizó su legado a favor de "los más vulnerables".
El rey Felipe VI fue más allá, afirmando que "su convicción de brindar consuelo a quienes lo necesitan seguirá inspirándonos". De igual manera, la italiana Giorgia Meloni habló de una pérdida que "nos deja sin un gran hombre", y el alemán Friedrich Merz elogió su "humildad y fe".
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, recordó sus oraciones por la paz en Ucrania y su compromiso de aliviar el sufrimiento. "Sabía dar esperanza", escribió. En Irlanda, el primer ministro Michael Martin lo describió como una persona "comprometida con la dignidad humana" y recordó su disculpa de 2018 por los abusos cometidos en la Iglesia. También llegaron emotivas palabras desde Asia y África.
El presidente egipcio, Abdel Fattah al-Sisi, lo llamó "una voz de paz y compasión" y elogió su defensa de "los derechos legítimos del pueblo palestino". En Turquía, Recep Tayyip Erdogan reflexionó sobre su papel en el diálogo interreligioso y sus acciones frente a "tragedias humanitarias, como la de Gaza".
En el norte de Europa, el primer ministro polaco, Donald Tusk, lo recordó como "un hombre cálido y sensato". Desde el Reino Unido, Carlos III habló de su «devoción, compasión y búsqueda de la unidad" en un mensaje que también evocó sus encuentros personales con Francisco. El Papa Francisco fue una figura capaz de tender puentes donde los había, de fomentar consensos en tiempos de fragmentación y de llevar palabras de consuelo donde reinaba el dolor.
En Asia, Sri Lanka lo despidió con respeto. El presidente Anura Kumara Dissanayake, líder de un país predominantemente budista, reconoció su papel en la promoción de la armonía interreligiosa. Ese mismo día, el Vaticano declaró a los 167 católicos asesinados en los atentados de la Pascua de 2019 "testigos de la fe", un gesto simbólico que marca la continuidad de la sensibilidad pastoral del pontífice. Desde la India, el Dalai Lama expresó su tristeza y elogió su vida sencilla, "dedicada al servicio del prójimo". Aseguró que "el mejor homenaje que podemos hacerle es ser bondadosos".
Desde Moscú, Vladimir Putin también se unió al homenaje. Lo describió como "un líder sabio y defensor de la justicia" y elogió su contribución al acercamiento entre las iglesias ortodoxa rusa y católica. El presidente de la Unión Africana, Mahmoud Ali Youssouf, lo elogió por su "gran voz moral" y reconoció su apoyo al pueblo africano: "Amplificó las voces de los que no la tenían y mostró solidaridad con quienes sufren los conflictos y la pobreza".
En Argentina, su tierra natal, los mensajes coincidieron en recordar al Sumo Pontífice como una figura de enorme significado para la humanidad, símbolo de paz, humildad y compromiso con los más necesitados. Uno de los primeros en pronunciarse fue el presidente argentino Javier Milei, quien despidió al líder de la Iglesia católica "con profundo dolor".
"Falleció hoy y descansa en paz. A pesar de las diferencias que hoy parecen insignificantes, haberlo conocido en su bondad y sabiduría fue un verdadero honor para mí", escribió el presidente. "Como Presidente, como argentino y, fundamentalmente, como hombre de fe, me despido del Santo Padre y hago llegar mis condolencias a todos los que hoy nos encontramos ante esta triste noticia", escribió en un mensaje en redes sociales.
Minutos antes, la Presidencia de la República Argentina emitió un comunicado oficial expresando su pesar por el fallecimiento del pontífice y enviando sus condolencias a la familia Bergoglio. El gobierno nacional declaró siete días de duelo.