Masacre de civiles en Siria deja más de mil muertos en sólo tres días

Human Rights Watch (HRW) afirmó que las nuevas fuerzas de seguridad de Siria han ejecutado a sangre fría a cientos de personas. Las iglesias sirias han denunciado masacres de civiles inocentes.

Más de 1.000 personas, incluidos 745 civiles de la minoría alauita, han muerto en las provincias costeras de Siria en tres días de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad de la nueva administración de Damasco y grupos leales al derrocado presidente Bashar al-Assad, informó el sábado (08.03.2025) una ONG.

"Hasta el sábado por la noche, el balance de muertos ascendía a 1.018", indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que indicó que "745 civiles fueron asesinados a sangre fría en masacres sectarias" en las provincias occidentales de Siria de mayoría alauita, la rama del islam chiita profesada por la familia de Bashar al-Assad.

Según la ONG, con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno, "el número de víctimas humanas ha aumentado rápidamente desde la entrada de grupos armados para apoyar a las fuerzas de seguridad y unidades del Ministerio de Defensa" de las nuevas autoridades en Damasco.

Las iglesias sirias han condenado las masacres de civiles inocentes y han pedido el fin inmediato de estos actos horribles.

Los peores enfrentamientos desde la caída de la dinastía Al Assad en diciembre de 2024

Los enfrentamientos estallaron el jueves 6 de marzo de 2025, después de que insurgentes alauitas lanzaron un ataque contra las fuerzas de seguridad en la ciudad de Jableh en Latakia, desencadenando la mayor ola de violencia en Siria desde el derrocamiento de Al Assad el 8 de diciembre.

Según el desglose de víctimas, al menos 125 miembros de la Seguridad General, del Ministerio de Defensa y de otros grupos aliados han muerto en tres días de enfrentamientos; mientras que otros 148 "individuos armados" leales al régimen de Al Asad han muerto en los enfrentamientos que han tenido lugar en las provincias de Latakia, Tartus, Homs y Hama.

Piden documentar masacre de civiles

Las muertes de civiles y ejecuciones sobre el terreno se han producido principalmente en las provincias costeras de Latakia y Tartus, antiguos bastiones de la familia Assad y núcleo de la comunidad alauita, a la que pertenece alrededor del 10% de la población siria.

Ante la masacre de civiles, la ONG llamó a la comunidad internacional "a tomar medidas urgentes y enviar equipos internacionales de investigación especializados para documentar las graves violaciones que han afectado a los civiles". También pidió a las autoridades de Damasco que "pidan cuentas" a sus tropas implicadas en estas acciones, considerando que "la impunidad alienta la repetición de crímenes en el futuro, lo que amenaza la estabilidad política y social en Siria tras la caída de Al Assad".

La nueva administración siria no ha reconocido explícitamente estos actos, pero ha dicho que emprenderá acciones legales y exigirá responsabilidades a cualquiera que haya cometido "excesos" o "actos de venganza" contra civiles durante operaciones militares destinadas a sofocar los focos de insurgencia de los grupos pro-Assad.