Proveedor de agua para casi la mitad de Gaza reanuda servicios tras liberación de empleado por Hamás
La Compañía Abdul Salam Yassin retoma operaciones tras la liberación de un empleado detenido por Hamás; el suministro de agua sigue siendo vital para más de un millón de personas en la Franja de Gaza.
Una empresa de Gaza que opera plantas de desalación de agua, que abastecen a casi la mitad de la población del enclave, anunció el martes que había reanudado sus operaciones después de que Hamás liberara a un empleado detenido el lunes.
En un comunicado, la Compañía Abdul Salam Yassin, cuyos servicios alcanzan a más de un millón de personas, indicó que la decisión de retomar operaciones se tomó tras resolverse el incidente, y que el empleado estaba "bien y con buena salud".
La compañía pidió disculpas por lo que calificó como un "malentendido" que llevó a la detención de su trabajador y reafirmó su respeto por el gobierno de Hamás en Gaza. Por su parte, funcionarios del gobierno de Hamas no hicieron comentarios sobre la detención, aunque una fuente confirmó el miércoles que el empleado había sido liberado, sin detallar los motivos.
Una rara muestra de disenso en Gaza
El incidente representa una rara muestra de disenso contra Hamás, que gobierna el enclave palestino desde 2007. En marzo y abril se registraron breves manifestaciones exigiendo el fin de la guerra y que Hamás cediera el poder, pero estas se extinguieron tras advertencias de que no se toleraría el desorden público.
El grupo ha ido reafirmando su control en áreas de Gaza de las que las fuerzas israelíes se retiraron bajo el alto el fuego del 10 de octubre, mientras continúan las negociaciones sobre el futuro del territorio devastado por la guerra.
Agua y saneamiento: una infraestructura crítica y vulnerable
Israel detuvo todo suministro de agua y electricidad al inicio de la guerra provocada por el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, aunque luego flexibilizó parcialmente el bloqueo de servicios.
La mayoría de la infraestructura de agua y saneamiento de Gaza ha sido destruida, y las bombas de los acuíferos dependen de electricidad de pequeños generadores, cuyo combustible escasea debido a las restricciones israelíes, por temor a que se desvíe para uso de Hamás.
El trabajo de la Compañía Abdul Salam Yassin es vital: posee tres plantas de desalación principales, 80 más pequeñas y más de 70 camiones que distribuyen agua a lo largo del enclave, garantizando suministro a millones de habitantes donde el agua potable es escasa.
Contexto político y seguridad
El plan de 20 puntos del expresidente estadounidense Donald Trump para Gaza postguerra establece que Hamás debe desarmarse y renunciar a cualquier papel futuro en el gobierno del enclave, aunque aún no se ha decidido quién reemplazaría al grupo.
Hamas se niega a entregar su armamento antes de que se establezca un estado palestino. Actualmente, las fuerzas israelíes controlan aproximadamente la mitad de la Franja de Gaza, mientras la reconstrucción y la gestión de servicios básicos siguen siendo desafíos críticos.



