Reino Unido, Francia y Alemania inician un proceso para reimponer sanciones a Irán

Estados Unidos e Israel elogiaron la medida, mientras que el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Gideon Sa'ar, la calificó como un "paso importante" para contrarrestar las ambiciones nucleares de Irán. Teherán continuará las conversaciones con el E3 antes de que entren en vigor.

El Reino Unido, Francia y Alemania anunciaron el jueves su decisión de volver a imponer sanciones de la ONU a Irán por su programa nuclear, lo que provocó indignación entre los funcionarios iraníes y elogios en Israel y Estados Unidos.

La medida fue anunciada en una carta al Consejo de Seguridad de la ONU enviada por las potencias europeas, al iniciar un proceso de 30 días para reimponer medidas punitivas contra la República Islámica.

El E3 había estado amenazando con activar el mecanismo de reimposición durante meses y corría el riesgo de perder su capacidad de restablecer las sanciones a mediados de octubre en virtud de las disposiciones del acuerdo nuclear de 2015 con Teherán. Los tres firmantes europeos del acuerdo, ahora moribundo, mantuvieron varias rondas de conversaciones con Irán desde que Israel y Estados Unidos atacaron sus instalaciones nucleares a mediados de junio, en un intento de frenar el programa nuclear y de misiles balísticos de Teherán.

Las conversaciones buscaban llegar a un acuerdo para posponer el mecanismo, pero el E3 consideró que las conversaciones celebradas el martes en Ginebra no resultaron en compromisos suficientemente tangibles por parte de Irán.

Las naciones europeas acusaron a Teherán de violar decisivamente el acuerdo, cuyo objetivo era impedir que el régimen obtuviera un arma nuclear. Estados Unidos, que era parte del acuerdo, se retiró durante la presidencia de Donald Trump en 2018 y mantuvo negociaciones indirectas fallidas con Teherán a principios de este año.

Los ministros de Asuntos Exteriores francés y alemán subrayaron que la decisión, que sólo implicará sanciones específicas a finales de septiembre, no marca el fin de la diplomacia con Teherán.

  • "Estamos decididos a aprovechar la ventana de 30 días que se abre para dialogar con Irán", declaró el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noël Barrot, en X. "Seguimos comprometidos con la diplomacia para garantizar que Irán nunca adquiera un arma nuclear".
  • El ministro de Asuntos Exteriores alemán, Johann Wadephul, instó a Irán a cooperar plenamente con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y a asumir un compromiso claro de negociar directamente con Estados Unidos, afirmando que la diplomacia aún puede continuar.

Un alto funcionario iraní, en declaraciones a Reuters, afirmó que la medida era "un acto contra la diplomacia, no una oportunidad para ella". Admitió que Irán continuará la diplomacia con el E3, pero "no cederá ante la presión".

El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi, dijo que Teherán "responderá apropiadamente" a la decisión, calificándola de "ilegal e injustificada".

Los ministros del E3 informaron el miércoles de su decisión al secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, expresando su esperanza de que Irán se comprometa a presentar compromisos sobre su programa nuclear a finales de septiembre que los convenzan de posponer acciones concretas.

Rubio celebró la decisión en un comunicado emitido el jueves, subrayando que las potencias europeas habían entablado negociaciones antes de proceder a la imposición de sanciones. "Estos aliados europeos han expuesto claramente el continuo 'incumplimiento significativo' de Irán con sus compromisos nucleares, sentando una base sólida para la reactivación", dijo Rubio.

"El E3 podría haber iniciado la reactivación en cualquier momento desde 2019, pero optó primero por buscar un mayor compromiso y diálogo para brindar a Irán una salida diplomática a su estrategia de escalada nuclear", continuó.

La medida también fue recibida con elogios por las autoridades israelíes. El ministro de Asuntos Exteriores, Gideon Sa'ar, calificó las sanciones de "inevitables", al tiempo que advirtió que Irán no ha renunciado a su objetivo de obtener un arma nuclear. En un artículo publicado en X, elogió la medida como "un paso importante en la campaña diplomática para contrarrestar las ambiciones nucleares del régimen iraní".

El embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, también elogió la acción, afirmando que "los países del mundo se están uniendo a la lucha contra el eje del mal". "Este es un paso importante para detener el programa nuclear de Irán y aumentar la presión sobre el régimen de Teherán", añadió.

El breve conflicto militar entre Israel e Irán comenzó el 13 de junio con un sorpresivo ataque israelí y terminó 12 días después, poco después de que Estados Unidos se uniera a la campaña, atacando tres instalaciones nucleares clave.

Israel afirmó que su ataque generalizado contra los principales líderes militares de Irán, sus científicos nucleares, sus plantas de enriquecimiento de uranio y su programa de misiles balísticos fue necesario para impedir que la República Islámica llevara a cabo su plan declarado de destruir el Estado judío.

Irán ha negado que busque adquirir armas nucleares. Sin embargo, ha enriquecido uranio a niveles que superan el uso pacífico, ha obstruido la inspección de sus instalaciones nucleares por parte de inspectores internacionales y ha ampliado su capacidad de misiles balísticos. Israel afirmó que Irán había dado pasos recientemente hacia su desarrollo militar.

Irán respondió a los ataques israelíes lanzando más de 500 misiles balísticos y alrededor de 1100 drones contra Israel. Los ataques causaron la muerte de 31 personas y heridas a más de 3000 en Israel, según funcionarios de salud y hospitales.